sábado, 24 de enero de 2015

LA SEGUNDA LEY BIOLÓGICA

La segunda ley biológica regula todos nuestros procesos corporales, basándose en las sensaciones que percibimos. El sistema nervioso autónomo que controla las acciones involuntarias, tiene dos ramas.

¿Que ramas son esas?
     - Simpático y vagal.

Ejemplo:

- Durante el día, estamos en estado simpático tónico.

Significa que estamos enérgicos, activos y concentrados en nuestras ocupaciones. Lo mismo que los animales que utilizan el día para cazar a sus presas.



- Por la noche estamos en vagotonía.

Nos encontramos en un estado estupendo para descansar, dormir.
Nuestras disposiciones se quedan en pausa, de esta forma se vuelven a maximizar las fuerzas que vamos a necesitar al día siguiente para nuestra supervivencia con el exterior.

Por eso es tan importante dormir perfectamente el día antes a un examen.
Este estado es el que nos hace estar cansados tras las comidas, pues la digestión es un estado vago tónico regenerativo.

¿Entonces necesitamos alternar esos dos estados con un ritmo regular?
¡Cierto! Y si somos trasnochadores en vacaciones pues estaremos en el estado simpático tónico, por lo que los compensaremos con otros días de vagotonía prolongada para equilibrarlos nuevamente. (Ying y yang)

Es por eso que solemos decir que tenemos sueño acumulado cuando nos pasa esto.
Por eso, cuando tú, estas sufriendo un conflicto grave para tu bienestar, tu cuerpo luchara utilizando al máximo y durante el tiempo necesario toda la energía de la que dispone para combatir cualquiera que sea esa amenaza y nos enfermara si esto sucede durante semanas o incluso meses.

¿Por qué?

Porque necesitamos descansar para poder funcionar correctamente y estabilizar todo nuestro mecanismo. Además esa sensación de amenaza que nos alerta y no nos deja descansar nos desactivará las ganas de alimentarnos porque de esta manera se ahorra mas fuerzas que gastara si tuviera que trabajar en la digestión.
Y no solo eso. También aparecerá el insomnio para quitarnos de encima, esa amenaza que nos preocupa, lo antes posible.

Estaríamos siempre en la fase simpático tónica.

Conocí la historia de unos soldados que necesitaban salir lo más veloces posibles de un incendio en las montañas. El calor del fuego cada vez sofocaba más los torsos desnudos de los soldados que corrían a una velocidad increíble para salvar sus vidas. Fue un milagro que lo consiguieran, un autentico milagro que solo el cuerpo sabe cuando crearlo. Una vez se sintieron totalmente a salvo cayeron en la hierva desmayados. Sin ningún tipo de fuerza para moverse.

Entraron en juego:

primero la fase simpático tónica, utilizando la máxima energía de la que disponían los soldados para conseguir la supervivencia y una vez dejaron de oler el peligro, entró en escena la fase vagotonica para recuperar todas las capacidades perdidas anteriormente.
Cuando ya han conseguido salvar la vida, los soldados se empiezan a encontrar muy cansados y débiles, han tenido que gastar todas las reservas de energía de las que podían disponer y ahora les tocaba descansar fuera de sus controles.

Pero… ¿que tiene que ver esto con los tumores?

Si sientes un miedo espantoso a algún tipo de amenaza dejas de descansar y día a día si perdura esa amenaza sin que podamos resolverla... ¿nos irá chupando toda la energía hasta acabar con nosotros?
De alguna manera... ¡sí! ¿Pero que amenaza es la que podría chuparnos toda esa energía manteniéndonos despiertos día a día sin poder guardar la vigilancia?

Eso a lo que se le llama enfermedad, es para nuestra mente, una amenaza que sería complicada de resolver, por lo que cada día y cada noche de la sensación de peligro permaneces en simpaticotonia.

“Pero mi cuerpo debe saber que no es un animal, ni el fuego lo que me podía estar amenazando, era algo interno” pensarás…
Pero la biología de nuestro cuerpo piensa que es un peligro mortal del que cree que literalmente se puede escapar.

Y si no consigues dormir, la superpunción de tus alvéolos pulmonares puede seguir creciendo, para que tu respiración funcione mejor. ¡Pura biología!

¿Que tiene que ver la respiración con esto?

Que nos hace mas fácil la huida de ese peligro que percibe el cuerpo como un depredador. Pues si tus pulmones están más activos, te ayudan a aguantar mucho mas tiempo corriendo.

¿Que crees que pasaría si tus alvéolos siguen trabajando así durante un año?

Puedes acabar poniendo en peligro tu vida por la falta excesiva de descanso.
Tu cuerpo se va consumiendo por momentos. La actividad inagotable de las células de los alvéolos pulmonares llevaría a la proliferación de las mismas y al aumento de tamaño.

¿Y si una persona va al medico en ese estado, que crees que le diagnosticaría?

Habría sido diagnosticado como “metástasis pulmonar”.
Eso empeoraría el estado anímico del paciente y este es el motivo por el que empeorarías mientras que todo tu entorno piensa que es el cáncer lo que te está consumiendo y todo este sin vivir cuando realmente la causa de esa situación la habría aumentado el largo periodo de stress que no dejaría descansar al paciente.
Pero un poco de tranquilidad, porque en esta vida siempre existen muchos problemas preocupantes que a veces no se logra superar y no por eso nos vamos a morir. Pues ya hemos dicho que esto depende del nivel de importancia que le de tu mente a ese problema.

Dos personas totalmente opuestas pueden tener el mismo problema. La persona excesivamente negativa muy probablemente acabe enfermando mientras que la que se adapta al conflicto asumiéndolo positivamente, rebosa de salud. Incluso a veces los acabamos olvidando sin que nos demos cuenta.

Es por eso que el tiempo, muchas veces, lo cura todo.

Y si el paciente vuelve al medico y esta vez le dicen que se a recuperado, aunque fuera mentira. ¿Que es lo que pasaría entonces en el funcionamiento del paciente?

Esta gran noticia le llevaría a entrar en vagotonía. Vamos que ya podría descansar por todo el tiempo perdido.

Un mes o dos o los que hayan sido sin descansar, por otro tanto de vagotonía. (Ying & yang) Así es como 
se volvería a reequilibrar todo el buen funcionamiento de su cuerpo.

Desde el momento de la gran noticia tranquilizadora, permanecerá un mes agotado, pero tendrá las manos calientes, recuperará su apetito y ya puede concentrarse en otras cosas: aficiones, leer, escribir, cualquier cosa que antes en ese estado tan alarmante no podía.

Eso si que es una buena pista para saber que uno se está curando.

Hacia la mitad del proceso de curación, se produce un pequeño intermedio de epicrisis. Es la tercera y ultima ley biológica. Hablaremos de ella en el siguiente articulo.

ENLACES RELACIONADOS:

http://helenykah.blogspot.com.es/2015/01/la-primera-ley-biologica.html
http://helenykah.blogspot.com.es/2015/01/la-tercera-y-ultima-ley-biologica_24.html

http://helenykah.blogspot.com.es/2015/01/mente-y-salud-van-de-la-mano.html
http://helenykah.blogspot.com.es/2015/01/alimentacion-alcalina.html
http://helenykah.blogspot.com.es/2015/01/deberiamos-seguir-consumiendo-carne.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario